- El acolchado fabricado con polietileno es el máximo exponente de las tipologías de cultivo empleadas en las planciones de melones
El melón es una de las hortalizas en la que la aplicación de los plásticos de uso agrícola, en sus más diversas vertientes, ha repercutido más en los avances de su tecnología de cultivo. Ello ha influido en todas las modalidades de cultivo que se practican con él, tanto cuando se lleva a cabo al aire libre, bajo condiciones de semiprotegido con el uso de pequeñas protecciones, o como en régimen de protegido, realizado en invernadero.
El artículo sobre la “utilización de los plásticos en el cultivo de melón” de Josefa López-Marín, está disponible a la demanda en la Biblioteca de Horticultura. La autora pertenece al departamento de hortofruticultura, del Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario, IMIDA, La Alberca, Murcia, España; y en el artículo explica los aspectos del cultivo al aire libre, el semiforzado del melón y el cultivo en invernadero.
En el cultivo al aire libre, así como en el resto de modalidades de cultivo, el riego localizado se ha mostrado como el sistema más eficiente para la distribución y aprovechamiento de los caudales del agua de riego. Todos los elementos que componen la infraestructura de distribución de agua, integradas por canalizaciones primarias para el transporte, redes secundarias de distribución y ramales de riego, así como los propios emisores, son de plástico, recuerda López Marín, para resaltar la importancia de la plasticultura en la modernización de los cultivos de melones en todo el mundo.
El otro elemento plástico utilizado en el cultivo de melón al aire libre, y más propio de zonas hortícolas de menor desarrollo y de plantación estacional, sería el acolchado simple, integrado solo por la lámina, sin otro complemento.
El acolchado, en estos casos, se coloca fundamentalmente para promover una mayor inercia térmica y mantener la humedad de la zona del suelo en las oquedades del caballón donde se deposita el golpe de semillas, en número de 3 ó 4, para propiciar su germinación, y que, tras ello, las plántulas emergidas, son repicadas y eliminadas, menos una que seguirá a cultivo definitivo. En otros casos, la plantación se hace después de acolchar, con trasplante con plántulas procedentes de semilleros.
Actualmente la desinfección de suelos, instalación de cintas de riego, acolchado y plantaciones pueden hacerse mecánicamente con modernas herramientas hortícolas como las de Forigo Roteritalia y Ferrari Construzione
En el caso de los semiforzados la autora aprovecha para explicar las opciones de los plásticos más modernos como los biodegradables para acolchados, los empleados en pequeños túneles de PE o EVA; y como no, los agrotextiles, fabricados a base de tejido de polipropileno coextruído, otras posibilidades de "cubierta flotante" son plásticos microperforados.
Para los cultivos en invernadero el artículo “utilización de los plásticos en el cultivo de melón” de Josefa López Marín, describe tipos de cultivo diferentes como los de hidroponía con sustratos, los melones entutorados y los materiales de cubierta habituales en los invernaderos de plástico
Utilización de los plásticos en el cultivo de melón
Josefa López-Marín
Departamento de Hortofruticultura, Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Alimentario, IMIDA; La Alberca, Murcia, España
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