Satisfacción por la producción hortícola de Almería, ... sigue preocupando el comercio

4.12.12

Satisfacción por la producción hortícola de Almería, ... sigue preocupando el comercio

Informe sobre la campaña 2011-12 de la Fundación Cajamar

INFORMACION
Cada año la Fundación Cajamar en Almería elabora un informe que recoge los principales datos socioeconómicos de la campaña hortofrutícola en la región de los invernaderos de plástico españoles. Los datos macroecónomicos de esta actividad vistos desde una perspectiva local son como siempre "quasi" espectaculares.

La superficie de invernaderos activos en Almería es de 29.991 hectáreas y de ella sus productores realizan una exportación de hortalizas que alcanza el 70% del total que se recogen tan sólo en la provincia de Almería, unos 2 millones de toneladas. El director del Servicio de Estudios Agroalimentarios de Cajamar, David Uclés, destaca la visión internacionalizadora de la gestión hortofrutícola de la región frente a la atonía del mercado nacional español. El valor de las exportaciones, de Almería, tiene una cifra de 1.741 millones de euros. El tomate y pimiento son los productos estrella, dice el gabinete de comunicación de Cajamar, y el principal cliente es Alemania, seguida de Francia y el Reino Unido.

Productores y distribuidores
En las actividades de la hortofruticultura española hay gente preocupada por las presiones por el aumento de la competencia, ante lo cual, los estudiosos del sector recomiendan propiciar el crecimiento dimensional de las empresas comercializadoras. Para ello parece que en España se desarrollará la ley llamada “de fomento a la integración cooperativa”. Por otro lado, los gobernantes, según algunos con menos convicción en España, como anteriormente se hiciera en Francia, anuncian otra ley, ésta para transformar la cadena de distribución alimentaria con medidas para mejorar el funcionamiento de la cadena agroalimentaria.

En el informe Cajamar, como suele ser costumbre hacen sus análisis por campañas y en el de este año dicen que prefieren hacer las comparaciones sobre los resultados de la campaña 20011-12 con una serie media de las diez últimas campañas. Este ejercicio les permite una reflexión más sosegada. Con esta perspectiva del largo plazo, las mejoras de las campañas se matizan y aunque se seguiría produciendo un repunte del valor de la misma del 5,7 %, las variaciones en los diversas hortalizas cultivadas son importantes. Así, por ejemplo, el mayor aumento del mismo se produciría en la berenjena, seguida del calabacín y la sandía. Sin embargo, la judía verde continuaría en números rojos, por el proceso de continuo abandono sólo roto en el último ejercicio. Los melones, tomate y pimiento son hortalizas en descenso. En el caso del tomate, la reducción se ha producido recientemente, durante los pocos últimos años.

En el recuento comparado que hacemos en relación a los competidores principales, podemos concluir que España (y Almería con ella) ha fortalecido su situación competitiva en tomate, pimiento, berenjena y calabacín. Sin embargo, en judía verde, pepino y lechugas españolas se retrocede con respecto a las campañas anteriores. En melón y sandía arrecia la competencia de Brasil y Costa Rica, que se posicionan como dos agentes con creciente importancia en los mercados de la Unión Europea

En el informe no se mencionan Turquía ni a Egipto, dos países con una horticultura creciente que mira hacia los mercados europeos. En cambio hay preocupación por lo que desde hace años significa la competencia de Marruecos en tomate y judías.

Reflexiones del sector
Periódicamente, la Comisión Europea lleva a cabo un Eurobarómetro sobre cuestiones de seguridad alimentaria explica el informe Cajamar. En el realizado en 2011 se ponía de manifiesto que hay una serie de cuestiones que preocupan de forma recurrente a los europeos. La primera de ella es el tema de los residuos de pesticidas en frutas, verduras o cereales. En este sentido, la estrategia seguida por la horticultura de Almería no puede ser más correcta con la eliminación casi completa del uso de los pesticidas y la adopción masiva del control biológico.

A los europeos a la preocupación por su seguridad alimentaria le siguen aspectos similares, pero referidos a la carne y el pescado, temas de calidad y frescura (en los que el buen funcionamiento de la cadena de valor es indispensable) y la presencia de aditivos y conservantes en los platos preparados. Incluso un tema que parece ya superado (el mal de las vacas locas) aún preocupa a más del 40 % de los europeos. Es decir, las alertas alimentarias dejan poso en la memoria de los consumidores. En este sentido, “uno de los principales inputs del sector agroalimentario (en todos sus segmentos) es la confianza, casi al mismo nivel que en el sector financiero”, recuerdan los redactores del informe de la Fundación Cajamar

El competidor principal de la horticultura de Almería es Marruecos, es obvio, con salarios menores a los españoles, y esta competencia forma parte de las preocupaciones sobre el comportamiento futuro en el comercio hortofrutícola europeo. En la horticultura española las dificultades aumentan (y más en un contexto de crisis tan profunda como la que vive España); pero, por otro lado, contamos a nuestro favor, animan desde Cajamar, de un sistema productivo local, con un distrito agroindustrial que "nos permite ser más que la mera suma de las individualidades de nuestras empresas".