Parece más estructural que coyuntural
Los precios del último trimestre del 2011 en el conjunto de las hortalizas y un atinado informe de la Fundación Cajamar han trasladado a las organizaciones de productores de la principal región europea de la horticultura intensiva y a la sociedad una cierta preocupación por el porvenir. Las repetidas crisis en la floreciente horticultura de Almería de los últimos años se analizó con frecuencia como de situaciones coyunturales. Los precios de las verduras y frutas, suben y bajan se ha dicho siempre. Ahora, en la enésima de estas situaciones, todo el mundo reconoce que Almería se enfrenta a una crisis estructural. La horticultura europea ha cambiado. Cambian las técnicas de producción, las empresas hortícolas también se deslocalizan y a la vez, cambian las costumbres y hábitos de los consumidores
En Almería llueve sobre mojado, y valga la paradoja para una región en dónde la lluvia es escasa. Los productores culpan tan solo a los distribuidores de sus bajos precios. Hay organizaciones que se centran como cada año a la competencia de Marruecos en tomates y otras hortalizas. Hay quién también dice que la peor competencia de los productores de Almería son los demás productores de la propia región de Almería.
Pesimismo entre los que debieran ser portadores de soluciones
En la revista "fhalmería" dicen que prácticamente ningún producto muestra ingresos positivos en este periodo agrícola . Incluso en la organización profesional Hortyfruta muestran su pesimismo y consideran que “de prolongarse está situación el sector, que está agonizando, acabará por desaparecer.”
Los datos provisionales citados a noviembre de 2011 muestran que el valor de la producción comercializada ha descendido un 23% respecto al ciclo anterior. El volumen comercializado refleja una incremento del 5% y la cotización media cae un 22% en relación al mismo periodo trimestral de la campaña 2010/2011.
Según Hortyfruta, en informaciones recogidas por varios medios de comunicación españoles, es necesario gestionar estas crisis, ya que, de sus estudios se extrae que el sector está agonizando y no puede continuar más tiempo a merced de las fluctuaciones que se producen en el mercado y que se vienen repitiendo campaña tras campaña. De seguir en esta línea, el sector de la horticultura española tenderá a desaparecer y con él miles de puestos de trabajo, dicen en la interprofesional. En la provincia de Almería, cuya economía depende directamente de la horticultura, actualmente el paro se cifra en un 30%.
En la misma Hortyfruta y en otras organizaciones se dijo que la concentración de la oferta era la solución. Creo que ahora en la horticultura de Almería ya empiezan a creer que será solo una parte de la solución.
La pérdida de rentabilidad del sector hortofrutícola se ha intensificado en los últimos seis años debido a que las mejoras de los rendimientos logradas en las explotaciones "ya no compensan las reducciones de las cotizaciones" de los productos, según un estudio de la Fundación Cajamar, del que informa la revista F&H
El informe, titulado "Análisis de la campaña hortofrutícola de Almería 2010/2011" advierte de que los precios reales (una vez descontado el efecto de la inflación) de los productos hortofrutícolas han caído el 46 por ciento desde 1975.
Durante años, el sector ha podido hacer frente a esta tendencia gracias a la mejora de los rendimientos de las explotaciones, especialmente en el caso del número de toneladas cosechadas por hectárea, que ha aumentado el 122 por ciento en comparación con los registros de 1975. No obstante, el estudio afirma que las mejoras de los rendimientos ya no son capaces de compensar la caída de los precios hortofrutícolas, de modo que la pérdida de rentabilidad, "al menos en términos de ingresos", ha cobrado "mayor intensidad desde 2005".
Sólo en la pasada campaña, los diferente productos hortofrutícolas registraron una caída media de las cotizaciones del 7,7 por ciento en la provincia de Almería, una de las principales zonas productoras de Europa. De este modo, el valor total de la cosecha hortofrutícola almeriense cayó en la campaña el 7 por ciento, a pesar de que la producción aumentó el 0,96 por ciento, hasta 2.814.860 toneladas.
A la caída de los precios hay que sumar el aumento de los costes de producción, que en la pasada campaña volvieron a repuntar un 2 por ciento. Esta situación, en la que confluyen la reducción progresiva de los precios y el aumento de los costes, "va a conducir de manera casi segura a una reordenación del sector, en el que posiblemente primarán empresas de mayor tamaño y con amplia gama, y las muy especializadas en productos de menor demanda, pero más selecta", vaticina el último estudio de la Fundación Cajamar.
El informe advierte de que el futuro para el sector "se perfila complicado", tanto por la "reducción paulatina de la rentabilidad" como por las "repercusiones a largo plazo de la estrategia europea respecto a la PAC y los acuerdos comerciales con terceros países". La horticultura en Almería tiene futuro y sus crisis tienen soluciones. Sin embargo, en esta emblemática región, harían bien en no olvidarse que son la zona de Europa con mayor tasa de paro.
El papel de los sindicatos agrarios
Upa continúa con sus protestas por los bajos precios hortícolas. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Almería ha tirado, en una fecha reciente de diciembre, frente a las puertas de un supermercado Lidl de la capital almeriense unas sesenta toneladas de productos hortofrutícolas para protestar por los bajos precios que pagan en origen las grandes cadenas de distribución.
En esta segunda tirada de productos convocada por UPA, después de la realizada el pasado 2 de diciembre en la céntrica plaza de las Velas de Almería, han participado, dicen los periódicos locales, una treintena de agricultores, que han arrojado frente al establecimiento miles de kilos de pepino, pimiento, tomate y calabacín, traídos en tres camiones. Según ha explicado la secretaria general de UPA-Almería, Francisca Iglesias, estas protestas pretenden evidenciar la crisis que atraviesa el sector hortofrutícola, que atribuyen a una estrategia de las grandes cadenas de distribución para fijar los precios a la baja, por debajo incluso de los costes de producción. Iglesias ha apuntado que el coste de producción hortícola en Almería se sitúa en un promedio de seis euros, mientras que los agricultores están obteniendo en la venta una media de cuatro euros.
Esta representante sindical ha reivindicado que la situación para los agricultores es "insostenible" y ha criticado que las administraciones sigan sin regular la cadena alimentaria. A este respecto, ha advertido esta representante sindical, de que las autoridades de la competencia vigilan cualquier intento de los agricultores de regular los precios, mientras que a las cadenas de distribución se les permite ejercer su presión.
Precios bajos y tomates de Marruecos
Las organizaciones agrarias se movilizan dice el periódico on line Horto y las administraciones reclaman que la UE exija cumplir a Marruecos los acuerdos pactados.
Los productos agrícolas mantienen un amplio margen entre el precio que se paga al agricultor y el que tiene que abonar el consumidor por disfrutar del alimento. El último análisis realizado por la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (Coag) y las asociaciones de consumidores UCE y Ceaccu, reflejado en el Índice de Precios en Origen y Destino de los alimentos, pone de manifiesto que en el pasado mes de diciembre estas diferencias que se registran en la cadena alimentaria volvieron a aumentar. Concretamente el índice, una vez tomadas las referencias en 27 productos diferentes, quedó establecido en 6,37, lo que señala que el precio de los productos agrícolas, entre el agricultor y el consumidor, se incrementó un 537%.
Según Susana de la Rosa en Efeagro y recogido por Valencia Fruits y otros medios en los últimos cinco años en el sector hortofrutícola español se han dejado de exportar 54.432 toneladas, que se traducen en "una pérdida de la superficie productiva" en Andalucía y en la desaparición de empresas que contaban con el tomate "como principal producto".
Igual de significativo es el caso de Almería, la principal provincia tomatera de nuestro país. En esta región, las perspectivas para esta campaña, en línea con lo registrado en la anterior y, según datos de Coexphal, la producción subió un 6%, aunque su valor registró una caída cercana al 17%. Ante este oscuro panorama, el sector denuncia de nuevo, que Marruecos incumple lo establecido en el Protocolo Agrícola del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea. A su juicio, el de Coexphal, los incumplimientos en los cupos de exportaciones de tomate por parte del país magrebí, tanto en volúmenes como en precios de entrada fijados por Bruselas, están "desestabilizando" el mercado europeo de este cultivo y suponen una gran amenaza para el tomate español en particular.
Preguntas. ¿Cuáles son las respuestas?
Recoger las informaciones que contiene esta crónica en este blog creo que sirve para plantear preguntas, recoger ideas y esbozar reflexiones para contribuir a plantear respuestas para la modernización de la industria hortícola.
En el modelo de producción hortícola mediterránea, incluso llamado modelo Almería, no hay porqué cambiarlo todo. En una región dónde hay casi 30.000 hectáreas de invernaderos hay quién piensa en planificar el futuro. Coordinar, entre las organizaciones de productores, o desde éstas, a los propios productores con diversificación en fechas de plantaciones, modernizar una parte de los modelos de invernaderos, ampliar los modelos de producción quizás reformando también conceptos en el uso de los plásticos, dando cabida, en unos casos a los materiales rígidos, y en otros, al uso de mallas para las épocas de climas favorables o especies menos exigentes.
En la distribución alimentaria de los productos frescos. ¿Interesa regular el comercio? El poder lo tienen los legisladores y las administraciones. También se puede legislar a favor de los productores.
La innovación de la oferta. Innovar en frutas y hortalizas, como ha ocurrido con la floricultura y las plantas de vivero. En las industrias alimentarias lo saben muy bien, la gente no quiere comer siempre lo mismo. Diversificar las ofertas de tipos y variedades de frutas y verduras para que el comercio se vea obligado a escoger cual quiere que sea el estilo de la categoría en su enseña.
La innovación en la poscosecha y el marketing. Las posibilidades de los alimentos mínimamente procesados. ¿La V y VI gamas será una industria liderada por productores hortícolas en las regiones de origen o estará gestionada por la distribución alimentaria?
¿Para los productos en fresco hay oportunidades para la renovación, innovación y competencia a la distribución de tradicional de los otros alimentos con nuevos formatos en los canales de venta?
¿Las tiendas de proximidad y el comercio de productos frescos por toda Europa son una oportunidad para re-inventar el comercio de frutas y hortalizas? Las organizaciones de productores podrían participar en los nuevos canales de tiendas con planes de negocio de propiedad vertical. ¿Puede modernizarse y legislarse para crear códigos de buenas prácticas comerciales e higiénicas para las fruterías en los barrios de las ciudades europeas?
Informaciones relacionadas
- En su blog David Uclés enlaza y publica la presentación del informe de la Fundación Cajamar, de la campaña, 2010, 2011
- Crisis de otoño en Almería ( II )
- 10 Acciones de modernización para la horticultura. Tendencias (III)
- En la prensa del año 2010. La crisis aboca a la reconversión al célebre 'mar de plástico'. El milagro de los invernaderos de Almería, en sus horas más bajas